El piloto de Mercedes-EQ, Stoffel Vandoorne hizo valer su favoritismo en la temporada 8 de la Fórmula E, luego de terminar en el segundo puesto de la última carrera llevada a cabo en Seúl, Corea del Sur.
El belga fue el corredor más consistente, al acumular 14 podios, situación que lo llevó a superar a Edoardo Mortara y Mitch Evans, los otros candidatos al cetro.
El circuito urbano de Seúl fue dominado por Mortara, que se resarció de su abandono del sábado con un excelso pilotaje, mientras que Vandoorne, siempre por delante de Evans, sólo adelantó posiciones en los últimos giros, hasta cruzar la meta en segundo lugar después de 34 vueltas.
Las esperanzas de Evans, ganador el sábado y segundo en la general a 21 puntos, habían quedado muy reducidas al no pasar a la ronda de eliminación directa en la calificación. Tuvo que partir desde el puesto 13 y su progresión durante la carrera sólo le llevó hasta el séptimo puesto.
El británico Jake Dennis (Avalanche Andretti FE) completó el último podio de la temporada, a 6,649 del ganador.
Dominio de Mercedes
El título de Vandoorne confirmó el poderío de Mercedes al suceder a su compañero de equipo, Nick De Vries, en el palmarés de la Fórmula E. La fiesta fue completa para Mercedes EQ, que se anota también el título de equipos, revalidando el doblete de la temporada pasada. Un broche de oro para la marca de la estrella que el año que viene no estará en la competición eléctrica.
“Increíble la temporada que hemos tenido: la consistencia y el auto han sido espectaculares, y el equipo ha hecho un trabajo increíble. Creo que cada uno de nosotros lo merece. Lo que hemos logrado es algo especial”, declaró Vandoorne tras la carrera.
El belga destacó que a pesar de que sus rivales por el título habían ganado más carreras que él, tuvo un desempeño más regular durante toda la zafra. “Tienen más victorias que yo, pero creo que tengo la mayor cantidad de podios. Fue difícil concentrarse porque el ritmo al final era muy alto, sabía que Jake tenía una penalización de cinco segundos, así que tuve que permanecer lo suficientemente cerca de él para asegurar la P2. Fue un día increíble, mucha concentración. Estoy agotado después de este año, ha sido un gran esfuerzo”, subrayó.
Vandoorne, de 30 años, continuó en Seúl con su estrategia conservadora para minimizar riesgos y aprovechar la ventaja de 21 puntos sobre el neozelandés Mitch Evans (Jaguar RCS) con la que afrontaba la última carrera, para proclamarse campeón.
Con el título de Fórmula E, el piloto de Mercedes suma un nuevo cetro que se suma al campeonato de las GP2 Series en 2015. Cabe destacar que Vandoorne tuvo paso en la Fórmula 1 en 2017 y 2018.