Como si fuera una película del futuro, los drones han irrumpido al mercado de carreras con una tecnología eléctrica de primera. Airspeeder es el nombre de este nuevo deporte de motor aéreo, cuya competición comenzará en el año 2021 y ya realiza espectaculares exhibiciones para ultimar detalles de su lanzamiento.
La compañía de origen australiano, Alauda Aeronautic, –fundada en 2016– ya trabaja en los últimos prototipos de estos nuevos vehículos eléctricos que llevarían la emoción y la velocidad de las competiciones a los cielos.
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Estos vehículos eléctricos están comenzando a hacerse muy populares, sobre todo en su versión autónoma, destinados a formar parte de una flota de vehículos compartidos para realizar desplazamientos en las grandes urbes.
Los fundadores de la serie de carreras Airspeeder Alauda afirman que ofrecerán una mezcla de ciencia ficción y videojuego como parte del «deporte de motor más emocionante y progresivo del planeta».
Orígenes del proyecto
Alauda Aeronautic creó en el año 2018 su primer modelo, el Mk 2, un vehículo monoplaza construido con la capacidad de volar a una velocidad máxima de 60 km/h. El último en sumarse a esta colección fue el Airspeeder Mk 4, un modelo con ocho hélices, despegue y aterrizaje vertical, ocho motores eléctricos basculantes de 45 kw –uno en cada hélice–, y una potencia conjunta de 488 caballos, características que le permitirían alcanzar una velocidad máxima de entre 130 y 200 km/h y una autonomía de vuelo de entre 13 y 15 minutos.
Los “vehículos” están equipados con las últimas tecnologías de realidad aumentada que ayudan al piloto a navegar por el circuito que se construye a partir de realidad virtual.
Alauda proporcionará todo el hardware a cada uno de los equipos como una solución llave en mano. Sin embargo, el reglamento liberará la posibilidad de ajustar algunas de las características del vehículo a diferentes estrategias.
Detalles del torneo
La competición está conformada por rondas de eliminación en las que los pilotos se enfrentan cara a cara. Se incluyen paradas en boxes muy rápidas para cambiar la batería, que darán a cada uno de los enfrentamientos un aliciente de emoción y vistosidad.
La lista de equipos que ya se han interesado por el proyecto incluirá nombres ya reconocidos en las carreras convencionales de vehículos de cuatro ruedas. Además, también se han apuntado empresas de otros sectores, que se han visto atraídos por las posibilidades de desarrollo tanto tecnológico como deportivo que ofrece esta nueva competición.
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Pese a que la crisis sanitaria del COVID-19 ha retrasado todos los planes de la compañía, se espera que las primeras competiciones se puedan llevar a cabo en 2021 y los escenarios escogidos para los primeros eventos serán el desierto de Mojave, en California, y la ciudad australiana de Coober Pedy, localizaciones que aportarán ese toque, además de una mayor seguridad al tratarse de recorridos sin interferencias.