ROKiT Venturi Racing pasó a estar en boca de todos en la Fórmula E por dos razones. Primero, los buenos resultados obtenidos en la temporada 7, y segundo, la confirmación de Lucas di Grassi como piloto de la escudería de cara a la octava campaña. Por ello, la jefa de equipo de la escuadra, Susie Wolff, tiene bien definidos los objetivos.
«Estar en los puntos con los dos vehículos durante todos los E Prix». Así, ve la jefe de equipo la actuación que deben hacer Edoardo Mortara y Lucas di Grassi, catalogando de «fundamental» la presencia de ambos vehículos en las posiciones importantes de la grilla para pelear con fuerza el campeonato de equipos.
«Tener ambos autos anotando puntos en cada carrera es esencial para nosotros para el Campeonato de Equipos y con nuestra nueva alineación de pilotos, hay mucho para sentirse optimista acerca de la octava temporada», apuntó Wolff según reseñó el portal Thecheckeredflag.
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No cabe duda alguna de la ambición tan grande que se propone el equipo monegasco después de ver a Mortara pelear por el título de pilotos, quedando a tan solo siete unidades del campeón Nyck de Vries. Sin embargo, los resultados colectivos no fueron los esperados. Norman Nato no logró una puntuación considerable y por ello, la necesidad de ir a por di Grassi se hizo inevitable.
Firmes candidatos
“Pasando a la octava temporada, Lucas se une a Edo, un ganador probado del Campeonato de Fórmula E que también aporta una gran experiencia. Se empujarán uno a otro y nos impulsarán como equipo», continuó.
Todo parece estar sobre la mesa para que la escudería ROKiT arrase en la próxima campaña, o por lo menos para estar constantemente en los puntos como bien señaló Wolff.
Por otro lado, como jefe de equipo deberá imponer su liderazgo al momento de tomar decisiones que perjudiquen a un piloto en específico pero beneficien a la organización, pues una batalla entre sus dos pilotos es lo que se vivirá en cada E Prix, y con ello, la presión por saber manejar el carácter y las ganas de triunfos de ambos será fundamental para la estabilidad del equipo.
Redacción | Ronald Ortega